El grupo Duck Sauce nunca pensó que su vídeo Big bad wolf sería considerado inapropiado y demasiado extremo para Youtube. Lo cierto es que ha sido restringido para mayores de 18 años en la popular web de videos.
"Terminó siendo un poquito más repugnante de lo que pensábamos", explica el director del vídeo, Keith Schofield, el cual no está de acuerdo con los que le acusan de hacer un videoclip vulgar.
El vídeo, que fue lanzado para la publicación Rolling Stone el 24 de octubre, va sobre dos hombres que van a un club y ligan -con las cabezas de Duck Sauce entre sus piernas-. “A mi madre le gustó”, explica A-Trak, uno de los dos miembros del dúo afincado en Nueva York. Y añade: “Me dijo que era divertido, pero le hacía sentir un poco incómoda. Y no se lo pudo enseñar a mi padre".
Al principio se pensó hacer un casting de actores con barbas para que protagonizaran las caras de la entrepierna. Al final fue el grupo el que decidió poner sus rostros. “Si podemos hacer este vídeo podemos hacer todo lo que nos propongamos”, recuerda A-Trak que pensaron.
Se utilizaron algunos efectos en post-producción, pero las cabezas entre las piernas fueron reales, demasiado real, incluso. Para obtener el efecto se utilizaron unos trajes verdes que se retiraron con la magia de la post-producción. Así que los dos miembros de Duck Sauce se pasaron dos días de rodillas y con dos actores subidos sobre sus hombros.
“Todavía estoy tratando de borrar el momento de mi memoria”, explican: “Pero fue bastante higiénico. Estábamos bien protegidos. Vamos a dejarlo ahí, porque al principio pensé que sería uno de esos momentos que sería mejor llevarse en secreto a la tumba”.
A pesar de todo el revuelo, los componentes de Duck Sauce son escépticos con que Big bad wolf tenga tanto éxito como su anterior single, Barbra Streisand: “Nunca pensamos que la canción Barbra Streisand se hiciese tan grande. Así que a lo mejor el universo demuestra ahora que estoy equivocado otra vez”.
Aquí puedes ver cómo se hizo Big bad wolf:
Y aquí puedes ver el vídeo otra vez, sin restricciones.
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