Ha saltado la noticia de que esta banda Catalana vuelve a los escenarios, tras la disolución casi irremediable del pasado 17 de Diciembre de 2011, fecha en la que deciden cancelar su última gira mundial, como despedida de 10 años en los escenarios como banda independiente, ya que fué en 2002 cuando decidieron prescindir de su dicográfica y publicar y autogestionar su disco "Barí".
Y la vuelta esta confirmada, ya que formarán parte del cartel del Viñarock de este año, pero con una nota destacable, vuelven sin los 2 miembros fundadores de la banda, Ramón Gimenez y Juanlu, que como culebrón artístico, llevan unos meses de disputas legales con la que es la tercera y última socia de la marca Ojos de Brujo, Marina Abad, cantante de la banda y conocida también como "La Canillas".
El culebrón se parece que se antoja largo, ya que Marina Abad sigue girando con una marca de la que no es totalmente dueña, y que arrastra bastantes deudas como sociedad, según las declaraciones del circulo cercano de la banda que se publicaron el 30 de Marzo en Europa Press. Una batalla legal y artística que según comentan, nació a partir de que el cubano Carlos Sarduy entrara a formar parte de la banda, e iniciar una relación sentimental con Marina Abad (con al que tiene un hijo en común) Se plantea pues que Carlos sea parte culpable de las nuevas tendencias artísticas de la banda de los últimos discos, que ya Ojos de Brujo pasó de sus inconfundibles influencias flamencas, a girar entorno al la música cubana.
Motivo por el que en el disco de Aocaná nacieran las divergencias artísticas que hicieron que Ramon y Juanjo empezaran a alejarse de la nueva filosofía de la banda, y que posteriormente, sumando una mala gestión de la Sociedad y una no muy buena relación entre los componentes de Ojos de Brujo, todo acabara de una manera un tanto fea.
Mucho dicen que Ojos de Brujo no es lo que era, y que tan siquiera veremos en el escenario a la esencia de lo que fué la banda, el caso es que este año, los seguidores de la banda tendremos Ojos de Brujo en directo, y tendremos la oportunidad de valorar como público la veracidad de esta reflexión.
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